Bajo la luz normal, la rana arborícola tiene una tez apagada, pero bajo una luz ultravioleta, brilla intensamente verde: la primera rana fluorescente del mundo ha sido descubierta cerca de Santa Fe en Argentina.

Científicos del Museo de Ciencias Naturales y del Medio Ambiente Bernardino Rivadavia en Buenos Aires hicieron el descubrimiento por accidente mientras estudiaban el pigmento de las ranas arborícolas, una especie común en todo el continente.

En condiciones normales de luz, la rana parece tener una piel verde pardusca, abigarrada y moteada con puntos rojos, pero bajo la luz ultravioleta, brilla con un brillante color verde fluorescente.

Ciencia y fluorescencia

La fluorescencia, la capacidad de absorber luz en longitudes de onda cortas y volver a emitirla a longitudes de onda más largas, es poco común en las criaturas que viven en la tierra.

Se descubrió que la rana translúcida usa una combinación de emisiones linfáticas y glandulares para producir fluorescencia.

Los investigadores, que publicaron su descubrimiento el 13 de marzo 2017 en Actas de la Academia Nacional de Ciencias, descubrieron que el rasgo mejoraba el brillo de la rana en un 19-29%. Esto depende del nivel de luz en su entorno y en su red ambiental.

Los misterios de los vertebrados

El compuesto que causa el brillo azul verdoso de la rana arborícola no se pensó previamente que existiera en los vertebrados y su descubrimiento ha entusiasmado a los investigadores.

“Esto es muy diferente de los fluoróforos encontrados en otros vertebrados. Generalmente son proteínas o cadenas poliénicas”, dijo María Gabriella Lagoria. Elle trabaja como una fotoquímica de la Universidad de Buenos Aires y es coautora del estudio.

El descubrimiento abre la posibilidad de que otros anfibios en la red ambiental puedan emitir fluorescencia. En particular aquellos con piel translúcida similar a la de la rana arborícola.

En declaraciones a la revista Nature, que publicó por primera vez noticias de la rana fluorescente, el coautor Julián Faivovich expresó su esperanza de que el descubrimiento inspire interés en el fenómeno. Julián Faivovich espera que los científicos “comiencen a llevar una linterna ultravioleta al campo”.